
He estado meditando mucho sobre lo que significa la vida, he buscado respuestas dentro de mi mente. Por que hay preguntas que nos hacemos y no queremos responder. Nos conocemos menos de lo que pensamos. He puesto sobre la balanza lo que he prometido hacer y lo que he hecho y he advertido el valor de una promesa. Quiero saber lo que ignoro, no debemos dormirnos con una duda que podemos conocer. Quiero comprender el comportamiento del ser humano. ¿Por qué roba? (por hambre dirán algunos), pero no todos lo hacen por eso, hay un factor desconocido, ¿Por qué aniquila?, ¿Por qué es un bufón, por que traiciona, por qué miente? Y por que principalmente tiene tantas virtudes y no las aprovecha. Durante mi niñez veía al mundo de una forma analítica, científica, con ojos de mosca. Escuchaba que existía un muro de Berlín que separaba a dos familias desde hacia mucho tiempo, los poetas latinoamericanos eran ávidamente consumidos en las librerías; la gente leía más, la crisis económica también estaba siempre ha estado, pero ya nos habíamos acostumbrado o mejor dicho nos habían acostumbrado. El niño de esos días si no tenía juguetes se los inventaba. Cuando llovía éramos los seres más afortunados del mundo, nos bañábamos con el agua de las nubes de los ochentas. Un día me enteré que alguien había asesinado a Jhon Lennon y no sabía por que esa muerte les afectaba tanto si no era ni siquiera familiar. Pero el tiempo que es el más sabio, te hace reflexionar y tu manera de percibir las cosas cambian. Ahora comprendo que para que alguien te haga sentir triste cuando muere, no tiene necesariamente por que ser de tu familia sino que con el solo hecho de haberlo(a) conocido y haber dado motivos para que uno lo deje entrar en su círculo, es ya suficiente para que lo hagas parte de tu familia. Ahora (y esto es inevitable) el tema nos lleva a reconsiderar la manera en que el hombre se maneja. Competimos de un modo aniquilatorio contra los demás, mejor dicho, buscamos siempre tener un coche, una casa, una mujer o viceversa, mejor que otros(as), más propiedades... y todo esto podría estar bien si acaso no descuidáramos un punto mucho más importante que los anteriores: el crecimiento personal, espiritual, más humanista. (Sin entrar a temas religiosos) todo podría resumirse en la falta de empatía, de ese sentimiento de "estoy contigo desconocido " o "sé lo que estás sintiendo" de cualquier persona. ¡Qué difícil es meter a una musaraña con otra musaraña en el mismo cajón! Lamentablemente la ética no puede agregársele al agua o a la leche. Bueno, tengo que finalizar con algo positivo para que esto de verdad tenga sentido. Lo único que puedo decirte ahora es que consideres a todas las personas que amas y te aman realmente como de la familia. La tierra se partió y por la grita podía verse el cielo...
Sábado, 13 de enero de 2001
Comentarios